viernes, 2 de diciembre de 2016

No se cambia la hora

El Gobierno descartó cambiar la hora: dice que ya no ahorra energía

Decisión oficial
El pico de consumo ahora se da por temperatura y no por uso nocturno de luz.



Hace tres años, en medio de una ola de apagones que amenazaba con arruinar los festejos de fin de año, Mauricio Macri le había pedido a la ex presidenta Cristina Fernández que volviera a atrasar una hora los relojes durante el verano para ahorrar energía. "Sería muy bueno para el este del país, sobre todo para Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba", había explicado el entonces jefe de gobierno porteño. La crisis eléctrica continúa, pero los técnicos macristas parecen haber cambiado de parecer y ayer descartaron que vayan a tomar la medida
"No tendría un impacto de ahorro porque la demanda pico de energía y de potencia ahora se da por la temperatura", explicó la subsecretaria de Ahorro y Eficiencia Energética, Andrea Heins. "El pico de consumo se produce por el uso del aire acondicionado y ello ocurre entre las 15 y las 16. Adelantar el horario no evita el pico de demanda de cada tarde. Y respecto del segundo pico, que se da de 20 a 21, parte de lo que se ahorraría por iluminación se usaría por la mañana", agregó.
La última vez que la Argentina tuvo una hora de verano fue entre 2007 y 2009. Buscando un anochecer más tardío y un mejor aprovechamiento de la luz solar, el kirchnerismo había decretado que entre octubre y marzo el país pase del huso -3 UTC al -2. Pero al año siguiente medio país -las provincias del oeste- se negó a aplicarlo por los trastornos que trajo en la vida cotidiana, y poco después la política se terminó abandonando.
Para Felicitas Arias, jefa de la sección de Tiempo del Buró Internacional de Pesos y Medidas, atrasar los relojes una hora más "no sólo no sirve para ahorrar energía, sino que resulta catastrófico". "Nos acercaríamos a la hora de la costa de África y y todo el oeste del país quedaría casi 3 horas desfasado, con la hora de máximo calor cuando la gente retoma la actividad", dijo a Clarín desde París. Y opinó: "Argentina se quedó lo que sería su horario de verano, y en invierno debería volver al -4, que es donde está la mayor parte del territorio".

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